Compartir

Mostrando entradas con la etiqueta CuentamePaz. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta CuentamePaz. Mostrar todas las entradas

viernes, 11 de abril de 2014

La vida sigue igual

Lo que se prometía como una Nochebuena en paz resultó una auténtica batalla campal con sorpresas incluidas. Ni el ambiente navideño, los villancicos y el espiritú que se vive en esas fechas consiguieron aplacar los ánimos.

La familia Álcantara seguía como el rosario de la aurora, cada uno por su lado. Y las fiestas familiares por primera vez no iban a ser tan familiares. Merche decidió en plena Nochebuena hacer borrón y cuenta nueva para ello nada mejor que remodelar su dormitorio, lo que implicaba tirar todo lo que había pertenecido a su marido, pero cuando el patriarca lo vió- a pesar de estar felizmente con Paz- no dudó en recriminar a su todavía mujer su actitud.



Unas fiestas en las que Tony tuvo que conformarse con escuchar la voz de su hijo, Santiago, por teléfono. El pequeño residente en Londres junto a su madre y llamó a su padre para contarle lo que había pedido a los reyes magos, un avión para que su papá lo visitara más a menudo.

Inés decidió viajar a Cuenca para reunirse con su hijo, el hermano de este y Carola para pasar las fiestas. Al finalizarlas y tras la muerte repentina de su padre, Eugenio, en un accidente de tráfico, el pequeño se trasladará a Madrid con su madre y la familia de esta. Un cambio muy drástico para el niño que apenas ha convivido con Inés y que como referente materno tiene a Carola. Veremos como se adapta.

Carlos, por su parte, seguía envuelto en el resentimiento y la rabia hacia su padre que le impedía disfrutar de las pequeñas cosas. Aunque tras las palabras de Josete en las que le recriminó su estado permanente de odio hacia el mundo y su mal humor, aconsejándolo que el por lo menos tenía un padre que se había preocupado por el, no como su amigo que al único progenitor que ha conocido ha sido a Desi- el benjamín de lso Álcantara hizo un esfuerzo por cenar en paz el día de Nochebuena. Mercedes se tragó su orgullo y pidió al padre de sus hijos que acudiera a su casa a cenar, a lo que este aunque previamente ya había quedado con Paz no pudo negarse. 



Lo que parecía una velada con las aguas calmadas, Herminia con su "humor" - había comido galletas de la madre de Gala que llevaban marihuana- fue amenizando la noche. Hasta que llegó la hora de los regalos y el heredero rechazó el presente de su padre. Una y otra vez todos le insistieron hasta que soltó lo que tanto tiempo llevaba dentro, desde que había descubierto la infidelidad en el Parador de Tobarra, nada había a vuelto a ser lo mismo.

Unas fiestas marcadas por las desavenencias familiares que ni los villancicos, ni el espiritú navideño consiguieron aplacar. Las aventuras y desventuras de los Álcantara siguen dejando pegados al televisor a un buen puñado de espectadores. Este jueves sedujeron a 4.129.000 millones y un 20,9 de cuota de pantalla.