Cuéntame se despide por todo lo alto con reconciliación incluida

Cuéntame cómo pasó cerró este jueves su décimo quinta temporada y lo hizo por todo lo alto. Récord de audiencia con casi cuatro millones de espectadores y de comentarios en Twitter. Media España estaba pendiente del paradero del hijo mayor de los Álcantara, Tony, y sobre todo si estaría vivo. Como ya anunció su protagonista, Imanol Arias en una entrevista, "el rubito" era inmortal. Y así fue, Mercedes y Antonio pusieron rumbo a Tánger para buscar a su hijo y uno de los "ángeles" del abogado los llevó hasta él. 

Aturdido y con pequeñas heridas, el joven consiguió salir del infiero al que su reportaje sobre el robo en joyerías le había llevado. Pero cuando, el matrimonio y sus hijo se encontraban a punto d de poner fin a la pesadilla y regresar a España, uno de los policías corruptos y autor del accidente que había costado la vida a los otros dos pasajeros, uno de los joyeros implicados y el inspector de Policía, Dávila, les interceptó habiendo pasado ya el control de seguridad. 

Sin escapatoria Tony guardaba información demasiado jugosa y comprometida como para dejarle volver a España. O la cinta en la que se encontraba la prueba del delito y acababa con la trama de corrupción y lo peor, con la carrera del policía corrupto, o Mercedes era acusada de narcotraficante por el propio policía. Como era de esperar, tras unos momentos de incertidumbre, el policía se quedó con la cinta en la que un testigo relataba el modus operandi de los robos a las joyerías y los Álcantara volvieren a San Génaro.

Dicen que los momentos más difíciles de la vida te unen más o te separan definitivamente de tu pareja, como no podía terminar de otra manera el broche final a esta temporada vino de la mano de sus dos protagonistas y su reconciliación. Tras las duros momentos que han hecho pasar a los espectadores, por fin se daban una segunda oportunidad. Algo que llenó de alegría a sus cuatro hijos y sobre todo a la madre de esta, Doña Herminia.

Cuéntame ponía así el punto y final a una de las temporadas más convulsas que se recuerdan. Centrada especialmente en la separación de sus protagonistas con la infidelidad de Antonio con Paz,  la serie del grupo Ganga ha ido fidelizando capítulo a capítulo a los espectadores. A mitad de temporada Cuéntame perdió un número importante de espectadores, la trama era demasiado floja y sus rivales demasiado fuertes. La Voz Kids o Tu cara me suena han puesto más de un jueves a la serie contra las cuerdas. De no tener rival pasó a ser la tercera opción de la noche. Pero todo cambió con las elecciones y la llegada al poder de Felipe González. 

Corría el año 1982 y el PSOE prometía nuevos aires, González llegaba al poder la misma noche que Mercedes descubría la infidelidad de su marido entre mitines, vinos y campañas electorales. Antonio le confesaba que no sabía si estaba enamorado de una empresaria bodeguera, Paz. A partir de ahí comenzaba la tortura de Merche y el resurgimiento de Cuéntame. De vivir un apasionado affaire con la bodeguera a esta dejarlo y perder el rumbo de su visa sumido en el alcohol y el tabaco. Cuando estaba a punto de perderlo todo, tuvo que acudir en la búsqueda de su hijo mayor y en ese instante todo volvió a ser como antes, a ser la familia que siempre habían sido.

¿Seguirá Tony vivo?

A punto de finalizar su décimo quinta temporada, lo hará este jueves, Cuéntame Como Pasó dejó a sus espectadores, este lunes, con una gran intriga. La muerte de uno de sus protagonistas,Tony, el hijo mayor del matrimonio Álcantara sufría un accidente en Tánger incendiándose el coche en el que viaja.

Si por algo se ha caracterizado esta temporada es por el giro que ha sufrido la trama principal. La temporada comenzaba con el affaire de Antonio y la separación del matrimonio. Adiós a más de treinta años de convivencia y los valores que el empresario encarnaba. Se rompía un mito y Mercedes pasaba a ser la gran sufridora. 

La vida de su hija mayor también daba un giro, dejaba aparcada su carrera como actriz para dedicarse al cuidado de su hijo, Oriol, tras la muerte de su padre en un accidente de trágico. El drama no terminaba aquí. Tony, en su faceta de periodista comenzaba a investigar un robo de joyas. Un auténtico escándalo de corrupción en el que estaba implicada la mismísima Policía. El joven desafiaba a las amenazas y ponía su vida en peligro para llegar al final del asunto, a la verdad.

Tony y Dávila durante su estancia en Tánger

Un arduo camino en el que se ha encontrado con numerosas piedras, y sorprendentemente con un aliado, un viajo enemigo que se ha convertido en su único camino para llegar al final. El inspector Dávila quien en la época del franquismo lo persiguió e interrogó ahora está de su lado. Sin pruebas y con el silencio como bandera, el periodista y el inspector de Policía decidían poner rumbo a Tanger para encontrar a los verdaderos cabecillas de la trama de corrupción. Pero quien para Dávila era un viejo amigo de confianza se convirtió en todo lo contrario. Un policía que con la ayuda de otro colega les tendió una trampa mortal cortándolos los frenos del coche. Dávila, Tony y uno de los joyeros implicados en el robo sufrían un accidente y caían por un terraplén. Ante la mirada victoriosa de los Policías, el automóvil ardía en llamas con el interrogante de si estarán o no vivos los pasajeros.

Un altibajo más para la familia Álcantara. Por si fuera poco, su patriarca ha perdido el control de su vida. Antonio, hundido y sumido en el alcohol está a punto de vender su negocio ante la falta de expectativas. Como no podía ser de otra manera, su mujer, Merche, acudirá en su salvación.

Un temporada que se cierra como la más dramática hasta la fecha. Las lágrimas y las decepciones han sido las protagonistas de la serie del Grupo Ganga. La separación de los Álcantara, el fallecimiento de Eugenio, la recuperación de Carlos tras su salida de la cárcel y ahora el paradero de Tony. En el último capítulo, Mercedes y Antonio viajarán hasta Tánger en busca de su hijo. El matrimonio removerá cielo y tierra hasta encontrar a Tony. ¿Morirá el periodista? ¿Se reconciliarán los Álcantara? 

Antonio se hunde y Mercedes sonríe

El que todo lo quiere todo lo pierde y sino que se lo digan a Antonio Álcantara este pasado jueves en Cuéntame. Nada hacía presagiar que su novia, iba a dejarlo, y por si fuera poco por su todavía marido. Mientras el empresario disfrutaba de su amor con la experta bodeguera en La Rioja- acudieron a la presentación de unos vinos en los que ella era la maestra de ceremonias- ella no estaba cómoda, se mostraba inquieta y distante.

Una tensión que fue en aumentó al conocer -Antonio- a su familia política, un encuentro distendido, para el, en la casa familiar, eso sí, sin revelar la verdadera relación que le unía a Paz. En mitad de una noche gris y fría, ella decidió poner punto y final a su relación con el ex- político. Aludiendo falta de compromiso por parte de el y sin querer nunca despegarse de su familia ella le confesó que su todavía marido la había pedido una segunda oportunidad, y lo peor de todo, ella lo echaba de menos. Ante semejante confesión, ambos decidieron poner rumbo a Madrid. Por el camino sufrieron un accidente sin consecuencias graves, ambos salieron ilesos. Mientras a ella la vino a recoger su marido, el fue atendido por su inseparable hermano. Con un simple y frío "adiós" se dijeron adiós para siempre.

Y si a Antonio las cosas en el amor no le van demasiado bien, lo contrario le sucede a Mercedes. Tras decidir perdonarlo y ver como Paz salía del hotel donde el se hospedaba, ha decidido que a rey muerto, rey puesto. Lucas, el fotógrafo que está ayudando a Mercedes y a Estefanía a poner en marcha su boutique, desde que la conoció fijó sus ojos en la de Sagrillas y no ha perdido oportunidad hasta que ha conseguido invitarla a salir. Algo que sus hijos han visto con buenos ojos, ella parece ilusionada, pero su madre, como siempre, se muestra reticente, no hay que olvidar que Herminia pidió a su hija que volviera con Antonio.

La tortilla se ha dado la vuelta, mientras él era feliz como unas castañuelas y ahora tiene que enfrentarse a una nueva vida esta vez solo, ella ha dejado de amargarse y sufrir para mirar de frente a la vida con otros ojos. Una semana más la serie del Grupo Ganga fue líder del prime time con casi cuatro millones de fieles- 3.937.000 y un 20,1% de share-, eso sí en esta ocasión se enfrentaba a un duro competidor

Telecinco estrenó la segunda edición del programa de saltos, Mira quien salta. Con un plantel de concursantes de lo más variopintos, desde el vidente Sandro Rey, Miriam Sánchez, la ex- modelo Maribel Sanz y su hijo -cuyo padre es Sergio Dalma-, la ex pareja de Álvaro Muñoz Escasi- participante de la anterior edición - hasta la empresaria millonaria Olivia Valere. 18 famosos con estilismo dignos de recordar saltaron a la piscina más famosa de la televisión dispuestos a encandilar a la audiencia. El programa fue segunda opción de la noche con 2.148.000 millones de espectadores y un 16,4% de cuota de pantalla.

Competitividad, estilismos imposibles y morbo están servidos en una segunda edición que se presenta más profesional. No en vano, el fichaje estrella del jurado ha sido el de la ex nadadora de natación sincronizada, Gemma Mengual.

Ni las flores aplacan el divorcio

Gracias por las flores o pesar del detalle nada podrá evitar que siga adelante con mi decisión. En el capítulo de este jueves de Cuéntame , Merche volvió a enfrentarse a su peor pesadilla. La posible reproducción de un tumor de pecho planeaba sobre la matriarca de los Álcantara. La empresaria se había detectado unos bultos, ante su creciente preocupación decidió acudir a su médico, en esta ocasión, sola. Sin la compañía como en ocasiones anteriores de su marido.

Su médico decidió ingresarla una noche para hacerla una biopsia, la todavía mujer de Antonio decidió llevarlo en secreto para no preocupar y nadie, su única compañía, su socia, Estefanía.  Pero, sin ella saberlo acudieron por sorpresa sus dos hijos mayores. Inés que mantuvo informado de todo a su padre- Antonio se encontraba camino de La Rioja con Paz para pasar un fin de semana-. La periodista notó al ex político preocupado y decidio investigar hasta saber que es lo que le sucedía. Finalmente Antonio confesó que esa misma noche operaban a Merche. La experta en vinos en un gesto lleno de humildad decidió cancelar el viaje y poner rumbo al hospital. Antonio no se atrevió a ver a su todavía mujer, pero envió a su mujer un ramo de rosas rojas.


La operación hizo a Mercedes replantearse las prioridades en su vida y pidió a su hijo, Tony, que redactaron el divorcio para lo que citó a Antonio en el piso de San Genáro. Antonio no imaginaba ni de lejos lo que le esperaba y aunque no se lo tomó demasiado bien decidió apechugar y firmar con tal de no pasar por un notario. Al firmar lo acordado Merche le agradeció el gesto que tuvo al enviarla las flores. Un detalle que no sirvió para aplacar los ánimos de la madre de sus hijos. Y mientras ajeno a todo permanecía Carlos muy ocupado en la representación de Rosa Chillón y en hacer más agradable la despedida de soltera a su psicóloga.

El joven y Lucía acabaron en la casa de la joven, pero al día siguiente todo volvió a la normalidad. Cuéntame volvió en este episodio a tratar el cáncer desde un enorme respeto y cuidando al máximo cada detalle. Por su parte, Miguel acogió en el piso que comparte con su hermano a Maurín al que su mujer había echado de casa por una infidelidad. El de Sagrillas y el dueño del Bistró salieron a olvidar sus penas y entre copa y copa Miguel confesó al socio de su hermano que eran hermanos. Una confesión, para alivio de los Alcántara que al día siguiente quedó en el olvido.

Un capítulo que sedujo a casi cuatro millones de personas, le veteranía es un grado y sino que se lo digan a Cuéntame al registrar 3.811.000 millones espectadores y un 18,7% cuota de pantalla. Una décimo quinta temporada en la que los guionistas de la serie han tirado la casa por la ventana con la separación del matrimonio y que está prevista que finalice el 29 de mayo. ¿Acercarán posturas el matrimonio antes de que acabe la temporada?

La vida sigue igual

Lo que se prometía como una Nochebuena en paz resultó una auténtica batalla campal con sorpresas incluidas. Ni el ambiente navideño, los villancicos y el espiritú que se vive en esas fechas consiguieron aplacar los ánimos.

La familia Álcantara seguía como el rosario de la aurora, cada uno por su lado. Y las fiestas familiares por primera vez no iban a ser tan familiares. Merche decidió en plena Nochebuena hacer borrón y cuenta nueva para ello nada mejor que remodelar su dormitorio, lo que implicaba tirar todo lo que había pertenecido a su marido, pero cuando el patriarca lo vió- a pesar de estar felizmente con Paz- no dudó en recriminar a su todavía mujer su actitud.

Unas fiestas en las que Tony tuvo que conformarse con escuchar la voz de su hijo, Santiago, por teléfono. El pequeño residente en Londres junto a su madre y llamó a su padre para contarle lo que había pedido a los reyes magos, un avión para que su papá lo visitara más a menudo.

Inés decidió viajar a Cuenca para reunirse con su hijo, el hermano de este y Carola para pasar las fiestas. Al finalizarlas y tras la muerte repentina de su padre, Eugenio, en un accidente de tráfico, el pequeño se trasladará a Madrid con su madre y la familia de esta. Un cambio muy drástico para el niño que apenas ha convivido con Inés y que como referente materno tiene a Carola. Veremos como se adapta.

Carlos, por su parte, seguía envuelto en el resentimiento y la rabia hacia su padre que le impedía disfrutar de las pequeñas cosas. Aunque tras las palabras de Josete en las que le recriminó su estado permanente de odio hacia el mundo y su mal humor, aconsejándolo que el por lo menos tenía un padre que se había preocupado por el, no como su amigo que al único progenitor que ha conocido ha sido a Desi- el benjamín de lso Álcantara hizo un esfuerzo por cenar en paz el día de Nochebuena. Mercedes se tragó su orgullo y pidió al padre de sus hijos que acudiera a su casa a cenar, a lo que este aunque previamente ya había quedado con Paz no pudo negarse. 

Lo que parecía una velada con las aguas calmadas, Herminia con su "humor" - había comido galletas de la madre de Gala que llevaban marihuana- fue amenizando la noche. Hasta que llegó la hora de los regalos y el heredero rechazó el presente de su padre. Una y otra vez todos le insistieron hasta que soltó lo que tanto tiempo llevaba dentro, desde que había descubierto la infidelidad en el Parador de Tobarra, nada había a vuelto a ser lo mismo.

Unas fiestas marcadas por las desavenencias familiares que ni los villancicos, ni el espiritú navideño consiguieron aplacar. Las aventuras y desventuras de los Álcantara siguen dejando pegados al televisor a un buen puñado de espectadores. Este jueves sedujeron a 4.129.000 millones y un 20,9 de cuota de pantalla.