El cierre de temporada tuvo como protagonista el incendio de la discoteca Alcalá 20, tras presentar su primera novela o al menos intentarlo, toda la familia se trasladó a la discoteca de la movida, la más famosa de la capital. Alcalá 20. La alegría se tornó en tragedia cuando un cortocircuito acabó con la vida de 82 personas por asfixia. Una historia que a muchos les recordó al Madrid Arena. El 17 de diciembre de 1983 muchos héroes anónimos salvaron la vida de cientos de jóvenes ante la imposibilidad de poder salir de la trampa en la que se convirtió una noche de diversión.
Con los pelos de punta, la piel de gallina, llorando y con una tensión constante por ver lo que sucedía con algunos actores de la serie, millones de fieles siguieron el episodio más dramático de los que se recuerdan. Un capítulo que marcará un antes y un después con unas logradas recreaciones históricas. Especialmente duro el momento en el que cientos de jóvenes piden ayuda agarrados a una verja.
Actuaciones magistrales de Carlos, Ricardo Gómez, intentando salvar a sus amigos y de Karina, Elena Rivera, afectada por la inhalación de humo. Hasta los últimos minutos nadie sabía si iba a sobrevivir. Pero los milagros existen y junto a la celebración del mundial del 83, con la victoria de España frente a Malta, los vecinos de San Génaro volvieron a sonreír gracias a la leve mejoría de la joven. La serie puso así, con esperanza y con la cancion alegría de vivir en segundo plano, punto y final a una de sus temporadas más dramáticas y lacrimógenas.