En sus tres temporadas de vida, Viajando con Chester ha conseguido afianzarse y convertirse en un referente para los políticos, o al menos eso es lo que parece. Por su sillón han pasado, en medio de la tormenta, Fabián Picardo, primer ministro de Gibraltar, el recién elegido Secretario General del PSOE, Pedro Sánchez, el líder de Podemos, Pablo Iglesias y próximamente lo hará Rosa Diez, líder de UPyD.
Una de las entrevistas más golosas era quizá ver a Pablo Iglesias responder a las preguntas de un Risto Mejide claro y directo, sin rodeos. Anoche el recién nombrado Profesor Honorífico de la Universidad Complutense de Madrid respondió sobre su defensa de Venezuela, la Banca, la deuda pública y no podía faltar preguntas sobre su novia, diputada de Izquierda Unida.De Venezuela dejó claro que hay cosas que no le gustan como su nivel de corrupción, pero la alaba en Sanidad y educación, accesible para todos."Cómo vamos a ser Venezuela. Nosotros somos españoles”.
Una conversación en la que no podía faltar "la casta", algo que ha utilizado para vincular a todos los partidos en el que sus miembros forman parte de algún consejo del sector energético o gasístico.Dotar a todos los españoles de una renta básica universal. 650 euros para todos aquellos que peor lo están pasando. Eso sí, midiendo siempre las necesidades. Una propuesta, al igual que la de no pagar la deuda,-reestructurarla, que "son de sentido común".
Su relación con Tania Sánchez no podía pasar desapercibida, algo en lo que Iglesias no se mojó demasiado. Eso sí, dejó claro que no la ha convencido para que le vote. Por último y como colofón su gesto de "siempre de cabreado". Algo tan sencillo en palabras del político, no se puede tener otra cara cuando las cosas no van bien, no le gusta brindar con champán, cuando hay casi seis millones deparados y gente a punto de ser desahuciada.
Tras una dosis de política llegó otra sobre humanidad, superación y generosidad de la mano del waterpolista y conductor de Hermano Mayor, Pedro García Aguado. Un Aguado sincero relató como cayó en el infierno de las drogas y el alcohol."Con 12 años mis padres se divorcian y yo no asimilé bien la separación".
"Empecé en la droga por azar, con alcohol. Desarrollé tolerancia y mi cuerpo ya lo aceptaba. Yo ahí estaba empezando a ser deportista de élite", comienza narrando. El ex campeón olímpico en 1996 se sinceró con Mejide sobre como fueron sus inicios, como tenía "dos vidas", la de deportista y la de "fiestero" hasta que el seleccionador no le apartó del equipo. Insatisfacción y no disfrutar de las cosas así pasaron los años hasta que "mañana lo dejo" gracias a su ingreso en un centro.
Un varapalo profesional que le hizo replantearse su vida. Con una hija de ocho meses dejó a su mujer porque esta no le permitía consumir cocaína en casa, al poco tiempo de tener a su segunda hija su madre lo recogió y entró en un centro de desintoxicación con la ayuda de sus progenitores. Sus inicios en el waterpolo, sus compañeros como el ex portero de waterpolo Jesús Rollán. "Una ausencia que no se llena con nada" así se expreso sobre su amigo y compañero.
Su relación con Tania Sánchez no podía pasar desapercibida, algo en lo que Iglesias no se mojó demasiado. Eso sí, dejó claro que no la ha convencido para que le vote. Por último y como colofón su gesto de "siempre de cabreado". Algo tan sencillo en palabras del político, no se puede tener otra cara cuando las cosas no van bien, no le gusta brindar con champán, cuando hay casi seis millones deparados y gente a punto de ser desahuciada.
Tras una dosis de política llegó otra sobre humanidad, superación y generosidad de la mano del waterpolista y conductor de Hermano Mayor, Pedro García Aguado. Un Aguado sincero relató como cayó en el infierno de las drogas y el alcohol."Con 12 años mis padres se divorcian y yo no asimilé bien la separación".
"Empecé en la droga por azar, con alcohol. Desarrollé tolerancia y mi cuerpo ya lo aceptaba. Yo ahí estaba empezando a ser deportista de élite", comienza narrando. El ex campeón olímpico en 1996 se sinceró con Mejide sobre como fueron sus inicios, como tenía "dos vidas", la de deportista y la de "fiestero" hasta que el seleccionador no le apartó del equipo. Insatisfacción y no disfrutar de las cosas así pasaron los años hasta que "mañana lo dejo" gracias a su ingreso en un centro.
Un varapalo profesional que le hizo replantearse su vida. Con una hija de ocho meses dejó a su mujer porque esta no le permitía consumir cocaína en casa, al poco tiempo de tener a su segunda hija su madre lo recogió y entró en un centro de desintoxicación con la ayuda de sus progenitores. Sus inicios en el waterpolo, sus compañeros como el ex portero de waterpolo Jesús Rollán. "Una ausencia que no se llena con nada" así se expreso sobre su amigo y compañero.
"Me cargué los mejores momentos de mi vida"."Quiero volver atrás" con estas palabras Pedro García Aguado, no sin emocionarse, dejó claro todos los momentos que se había perdido por sus adicciones y que nunca volverán.Pero su vida actual ha cambiado mucho, lleva once años recuperado, eso sí, matizó "esta enfermedad es muy bestia y no puedo bajar la guardia"- se dedica a ayudar a adolescentes con problemas de conducta o adicciones. El Hermano Mayor tiene claro que a algunos adolescentes sus padres les han dado todo y han producido en ellos el efecto contrario a la gratitud y el amor."Te hicieron un tirano, pero con todo su amor".
"Me jodí la vida" once años después Pedro García Aguado no pudo evitar derrumbarse al recordar el infierno que vivió a causa de sus adicciones. "Sólo uno mismo sabe que ha hecho mal las cosas y sólo uno es el responsable de salir y enmendar el error" esto es precisamente, enmendar el error, lo que García Aguado hace ahora en Hermano Mayor, ayudar a adolescentes a que cambien su vida. Una auténtica lección de superación y humildad al relatar el infierno vivido, una confesión con la que fue imposible no emocionarse. Viajando con Chester alcanzó casi los tres millones de telespèctadores, 2.823.000 y 14,5%, superando así a El Objetivo de Ana Pastor.
