Desde su estreno las críticas no se han hecho esperar. El programa musical se convirtió rápidamente en tendencia. La mayoría de espectadores lo calificaban de vergüenza para una televisión pública. Derroche innecesario en unos momentos en los que la pública no pasa por su mejor momento, ni en términos de audiencia ni en términos de rentabilidad. CC OO no ha dudado en pedir su retirada por retrogado y vulgar.
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| Los presentadores en un momento del programa |
Algo que no pasó inadvertido fueron los estilismos de las presentadoras, especialmente comentado hasta el punto de que se convirtió en trending topic fue el vestido de Berta Collado. El nuevo fichaje de la Mañana de Mariló Montero se marcó un Cristina Pedroche en toda regla con un vestido de lunares blanco y negro que deja poco lugar a la imaginación. Un completo desastre, chascarrillos sin gracia, errores garrafales, en el momento de presentar a Juncal Rivero en lugar de salir ella, lo hizo un número de ballet.
El resultado: parecía un programa propio de la televisión de los años 90. Su querían expectación la han conseguido, pero no audiencia. El primer programa, y tienen grabado 12 más, no llegó al millón de espectadores. 843.000 telespectadores y un 5,8% de cuota de pantalla. La televisión del pasado ha vuelto si TVE no lo remedia. Le quedan unos cuantos programas para mejorar y conseguir captar la audiencia que si quiere programas musicales los sábados. Su estreno no afecto ni al Peliculón de Antena 3 ni a las tertulias políticas de La Sexta y Telecinco.
