Pero tras unos minutos de risas, Alison Eckmann, una de las presentadoras, lo entrevistó en su casa. El Moreno amable y dicharachero dejo paso a su cara menos amable. Al preguntarlo por las leyendas que lo rodean salió a relucir los supuestos problemas del empresario con sus empleados al no pagarlos. Una conversación que subió de tono cuando Yolanda Ramos relató que ella había trabajado para el y no la había pagado. Lo que había comenzado como un espectáculo con Moreno cantando acabó con el propio actor dejando con la palabra en la boca a las 5 presentadoras invitando a los espectadores a que "no hablen con ellas".
Una situación atípica en la que Natalia Millán intentaba aplacar los ánimos del invitado con la elegancia y el saber estar que la caracteriza, Beatriz Montañez no se mordía la lengua, Yolanda Ramos seguía defendiendo sus derechos y la mirada de Sandra Barneda lo decía todo, la catalana no podía creerse lo que estaba viendo.
Tras abandonar el programa de forma abrupta, la presentadora de "De buena Ley" fue a buscar a Moreno para intentar calmarlo y de paso que regresará al plato. Pero el enfado del productor era demasiado grande como para volver.
Tras unos momentos de desconcierto en los que las redes sociales mostraron su apoyo a Montañez y a Ramos la normalidad volvió al plató y las chicas, tras pedir disculpas a Moreno, siguieron con el siguiente invitado. Julián Contreras para hablar del viaje benéfico que va a realizar su hermano, Cayetano Rivera.
El tercer programa se saldó con casi un millón de espectadores, 924.000 y un 14,8% de share. Hable con ellas subió respecto a la semana pasada. Ya lo dijo el productor teatral y empresario el programa había perdido audiencia y el fue a modo de salvación y lo consiguió.