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martes, 17 de diciembre de 2013

Gante atrapa, Brujas enamora y Bruselas fascina

Hoy quiero compartir algo diferente, quiero enseñaros un trocito de Bélgica, la cual me dejó enamorada. Desde sus calles que te transportan a otra época como una película de época, sus edificios hasta su capital, Bruselas: moderna y pero a la vez con el encanto de antaño.Tras un viaje un poco accidentado, al principio, llegamos a nuestro primer destino: Brujas. Una ciudad imprescindible para visitar.

A las 10 de la mañana ya estaba en Brujas dispuesta a ver cada rincón de la capital de la provincia de Flandes Occidental. Debido a la falta de tiempo, solo vi lo imprescindible. Si quería ver casi todo tenía que visitar dos ciudades en un mismo día. Por la tarde, llegamos a Gante, hacía mucho frío-nada nuevo-. Recomendación ir muy abrigados. Las temperaturas llegan casi a los 0 grados pero la sensación térmica es mayor. El verdadero encanto de esta ciudad reside en verla de noche. Una ciudad más cosmopolita pero muy bien conservada con sus famosas calles empedradas y multitud de edificios para ver.Actualmente, recibe más de 3 millones de visitas cada año, convirtiéndola en la ciudad más visitada de Bélgica, por delante de Bruselas. En el año 2000 se convirtió en Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Seis horas recorriendo la ciudad, que se resumen en ver la Plaza Mayor también llamada Markt, esta plaza es el centro neurálgico de Brujas,- En ella se celebra un mercado tradicional cada sábado-; La Catedral de San Salvador y numerosas iglesias y catedrales. Con un estilo, por cierto, bien diferente a lo habitual.








Gante se encuentra en el corazón de Flandes Oriental. Ni el frío te detiene, lejos del bullicio de las grandes ciudades, la tranquilidad da paso a una ciudad adormecida, sin ruidos pero que cautiva. la ciudad se encuentra rodeada de canales, no en vano el agua es otro símbolo de la ciudad.La ciudad que vió nacer a Carlos I de España- y V de Alemania- tuvo el honor el S. XVI, después de París, de ser la más grande de Europa al norte de los Alpes. Actualmente es la ciudad flamenca con mayor número de edificios históricos, una intensa vida cultural

Para no perderse los edificios más representativos son campanario de la Catedral de San Bavón y  la torre de la iglesia de San Nicolás o el puente de San Miguel, del que por cierto me esperaba otra cosa, me decepcionó.
Gante, con su Catedral de San Bavón- previo pago, claro está- este curioso templo aúna nada menos que tres estilos arquitectónicos (románico, gótico y barroco), y alberga el cuadro de los pintores Van Eyck: La Adoración del Cordero Místico







La siguiente parada, al día siguiente y último de mis mini vacaciones fue Mons, donde no podía faltar una visita al ayuntamiento, ubicado en el centro de la Grand-Place . Fue construido durante la segunda mitad del s. XV y todavía mantiene un imponente estilo gótico, muy parecido al de la Colegiata de Sainte-Waudru.
Y por último, La Colegiata Iglesia de St . Waudru. La iglesia gótica constituye una de las iglesias más antiguas de estilo románico. El edificio comenzó en 1450 y duró hasta 1690.


Dos horas más tarde pisaba Bruselas. Es la capital y ciudad más grande de Bélgica, y la principal sede administrativa de la Unión Europea. Apenas sin tiempo pero con una idea clara, quería ver el Parlamento británico y ahí que me fuí. 

Como núcleo de la Unión Europea y sede de la OTAN, puedes esperar que en Bruselas haya un ambiente multicultural y vibrante. El lugar central de reunión y punto de encuentro de la ciudad es la plaza Grand Place.

La Grand Place es el lugar más famoso, animado y fotografiado de Bruselas. Con decenas de famosos edificios, constituye uno de los conjuntos arquitectónicos más bellos de Europa.

El Palacio Real de Bruselas fue levantado a finales del siglo XVIII, aunque la fachada actual se construyó pasado el año 1900. Lo encontramos frente al Parque de Bruselas, en el centro de la ciudad.

Es el palacio oficial del Rey de los Belgas, aunque el Rey hace un más de un siglo que no reside en el. El Palacio Real de Bruselas sigue siendo la sede de la monarquía constitucional belga. Se encuentra situado junto al parque de Brusela

Otro lugar que no puedes dejar de ver son Las Galerías Saint Hubert, diseñadas en 1847, fueron las primeras galerías comerciales de Europa y, hoy día mantienen su belleza y elegancia intacta. Sus escaparates te fascinan, la decoración, las luces... Todo

El Parque de Bruselas refugio de caza real, también conocido como Parque Real, es el principal lugar de esparcimiento de los habitantes de la ciudad.
La Basílica del Sagrado Corazón está construida en estilo Art Decó y tiene 89 metros de alto y 167 de largo, siendo la quinta iglesia más grande del mundo.
Una pequeña recomendación no puedes irte de la ciudad sin probar sus deliciosos chocolates y su cerveza. Algo por lo que Bruselas es famosa, no en vano el olor a chocolate inunda sus calles.

Por último el Monte de las Artes, uno de los sitios culturales de relevancia de la capital de Bélgica. Un lugar que reúne diversos museos e instituciones culturales e invita a conocer un conjunto de colecciones a través de un pase único.Un viaje frenético pero muy recomendable. Encanto, tranquilidad y la sensación de estar en otra época pero a la vez en pleno siglo XXI.