Quien quiere casarse con mi madre y el amor triunfó

Cuatro cerró anoche la primera edición de Quien quiere casarse con mi madre (QQCCMM) y lo hizo con éxito, 1.343.000 de espectadores y 7,7% de cuota de pantalla pero que queda lejos si se compara con la final de la última entrega de quien quiere casarse con mi hijo(QQCCMH) que obtuvo un 12,5% de share.

 

Cinco madres dispuestas a encontrar el amor con el apoyo o el rechazo de sus hijos.
Bajo un entorno de cuento, todo envuelto en un ambiente romántico donde no faltaba la maestra de ceremonias, Luján Argüelles con un favorecedor vestido salmón, las cinco madres fueron desfilando una a una para afrontar una de las decisiones más importantes de sus vidas: elegir a su príncipe azul.

La madre de Gabi (ex concursante de la segunda edición de Quien quiere casarse con mi hijo) Toñi fue la primera en hacer su aparición estelar con un vestido de encaje y leopardo, demasiado recargo pero que ella puede lucir. Su elegancia, belleza y gusto no deja indiferente a nadie. Toñi bajo la atenta mirada de Gabía tenía que elegir entre poner el anillo a su adorado hijo o a su atractivo pretendiente,Tony. Quien según el Miguel Silvestre se parece a el. Humildad poca.

La empresaria decidió decantarse por su hijo, quien por otro lado no soportaba al pretendiente de su madre. El amor de madre pudo más que el de querer rehacer su vida. Una relación madre-hijo inquebrantable, veremos si alguien consigue destruirla. Como bien avisaba su retoño , el es el único hombre de su vida.

De la elegancia de Toñi a la sencillez de María teresa. Como si de un cuento de hadas se tratara apareció Mari Tere que llegó al programa para encontrar y marido y casarse, y lo consiguió. En el programa hizo otra confesión: estaba enamorada de un pretendiente. La dicharachera ama de casa -que confesó a Dios su difícil elección- colocando el anillo a Ángel. Eso si, con el visto bueno de su hijo, Nico, incluido.

La tercera en discordia fue Paulina. La profesora de fitness que prefiere que la mantengan, y trabaja por obligación, buscaba un hombre que la mantenga, a ella y a su hija Blanca. Dos pijas con lenguaje propio y que han dado grandes momentazos al programa con su vocabulario y su forma de ser. La que un día fuera compañera de pupitre de las Infantas apareció tan elegante como siempre pero echa un mar de dudas. Ambos pretendientes la gustaban, aunque solo uno era el preferido de su hija Blanca, Angel. Serafín según la hija solo quería "chusqui chusqui" . 

La madre hizo caso a su hija y se quedó con el apuesto Ángel. "Mamica" hizo lo correcto. No sin un pequeño incidente, al poner el anillo a su Romeo el anillo cayó el suelo, un signo de buena suerte según su galán. ¿Podrá mantener el ritmo de vida de Paulina y sus caprichos?

Tras este final feliz apareció Charo, la policía y motera rockera, buscaba un hombre que aguantara su fuerte carácter. Ya lo decía su hijo. Kike: "No hay hombre que aguante a mi madre". Pues bien, su hijo por fin veía como su madre dejaba de lado su carácter para dar rienda suelta a sus sentimientos. Pep o Paco, Paco o Pep. al final, Charo impuso el anillo a su hijo Kike pero decidió empezar una relación con Paco.

La última en discordia, Mar. La dramaturga y escritora tenía una difícil elección: Jesús o Jordi. El segundo había siempre su eterno favorito. Para ella era como un flechazo, que se llamaría Jordi y que su Santo fuera el día del libro era más que una casualidad, el destino.
La bohemia Mar, con su hijo Javier echo un pincel, se quedó con su favorito. Un final feliz para cinco mujeres en busca del amor.

Con final feliz esta edición llegó a su fin. Adiós a los montajes, la música en segundo plano, perfecta. Los comentarios ácidos de Luján. Las confesiones de las madres o las advertencias de los hijos. Pero la saga casamentera no se acaba, Cuatro ya anuncia los castings de Un príncipe para... Y con su presentadora por mérito propio.